Diseñadora de producto digital
desde que Sketch e InVision estaban en beta (good ol’ 2014)
Ingeniero informático
tecnológicamente agnóstico añada del 2015
(al vacío)
Nos montamos una agencia de producto digital pensando que se venían los mejores años de nuestra carrera profesional, un montón de clientes, un estudio en el Cabanyal o Berlín, gatos, perros y una cantidad de proyectos apasionantes, bonitos y reconocidos internacionalmente.
En verano de 2019, se lanzó el primer proyecto con sello D&D, la web del evento Serifalaris en Bilbao, de la mano de Marina Goñi, web para la que hicimos adaptación móvil y desarrollo web.
Cuando 2020 empezó con una agenda llena de reuniones y presupuestos, creímos que el universo había decidido hacer realidad nuestras ilusiones...
El universo cambió su estado de Facebook a “Es complicado”. Llegó el COVID19, todos los proyectos y presupuestos quedaron en standby durante meses y Dunkelheit & Draper corría el riesgo de desaparecer.
Desanimados, estuvimos varias semanas pensando qué hacer con la agencia. Buscamos proveedores, dimos vueltas por estudios y finalmente reconvertimos nuestro proyecto por dentro y por fuera.
Kalte se pasó a Figma, Carlos aprendió a usar builders para construir webs y ahora seguimos compaginando trabajos con clientes de larga duración (dando apoyo técnico) con proyectos que nos encantan así como creando contenido de diseño, desarrollo y todo lo que hay alrededor de producto digital en Instagram, Twitch o YouTube entre otros.